¿Qué es?

Es una terapia donde las mujeres toman medicamentos o se colocan ciertos implementos en el cuerpo que contienen hormonas femeninas para reemplazar las que el organismo deja de producir durante y después de la menopausia. Hay un abanico de opciones, entre las principales están: las pastillas, los parches y las inyecciones

¿Quiénes pueden usarla?

Las mujeres que están atravesando o ya salieron de la menopausia. Este tratamiento también está indicado para prevenir la pérdida ósea y el desarrollo de la osteoporosis. Los especialistas señalan que su uso no debe extenderse a más de cinco años. Pero, si la persona tiene algún antecedente familiar de cáncer ginecológico (mama, útero, cuello uterino) no puede acceder a esta terapia, sería muy riesgoso para su salud

¿Cuándo optar por ella?

Solo cuando los síntomas (dolores de cabeza, irritabilidad, depresión, sequedad vaginal, poco deseo sexual y los famosos sofocos o bochornos) se presentan con mucha intensidad y afectan seriamente la calidad de vida de la mujer. Antes de solicitar la terapia hormonal, puedes ver otras alternativas. Por ejemplo, los antidepresivos (para mejorar el estado de ánimo) o el plasma rico en plaquetas (para mejorar la lubricación vaginal)

Peligros

Se ha visto que podría incrementar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, así como algunos tipos de cáncer (mama, endometrio). Por eso, es importantísimo que previamente la mujer sea evaluada por un especialista. Este verá sus síntomas, su historial médico y sus antecedentes familiares para determinar si el tratamiento le dará algún beneficio o no

Dra. Evelyn Campos
Ginecóloga de la Clínica Ricardo Palma