×
- (511) 224·2224 / (511) 224·2226
- Av. Javier Prado Este 1066 Urb. Corpac - 15036 Perú
- Dpto. Internacional
-
22 de agosto del 2020
El impacto del coronavirus nos cambió la vida y con ello los cuidados personales. La mascarilla pasó a ser un elemento fundamental de protección para evitar la propagación de contagios por la COVID-19. Sin embargo, su uso permanente ha significado la aparición de afecciones nuevas en la piel, relacionadas al tiempo que la llevamos puesta, características propias de su confección y la tolerancia de cada persona a su uso
“Las dermatitis faciales pueden ser de tipo irritativa, ocasionadas por la presión, roce y frote de la prenda sobre la piel facial, que ocasionan las mascarillas muy apretadas, no muy ajustadas anatómicamente a la estructura facial, que se desplazan y están constantemente recolocadas, a lo que se agrega la humedad de la respiración y la transpiración que hace a la piel más vulnerable al estímulo físico. Estas reacciones les pueden ocurrir a cualquier persona. En la piel se observa enrojecimiento, sensación de ardor y, a veces, hormigueo y picazón”, explica el doctor Sandro Tucto, médico dermatólogo de la Clínica Ricardo Palma
Otra forma de reacción es la dermatitis de contacto alérgica. Ello se da frente a la composición que tengan en sus diversas confecciones, generalmente sintéticas, y a los componentes de ajuste como las ligas o elásticos
“También se observan reacciones de tipo acné por oclusión y humedad al llevar las mascarillas durante muchas horas, generando irritación, proliferación bacteriana y parásitos de la propia piel. La grasa acumulada ocasiona el cierre de los poros produciéndose impurezas que impiden la normal secreción de las glándulas sebáceas de la cara, lo que conlleva a cuadros de acné genuino”, añade Tucto
Otro cuadro es la rosácea, en el que el roce, la fricción, la temperatura alta y la humedad en esta piel muy sensible derivan en el enrojecimiento, las pústulas y los nódulos que se distribuyen en la zona centrofacial
“Todas estas reacciones serán más visibles en tipos de piel alérgica por sus características, pues son más delgadas y con poca producción de grasa”, explica
En los deportes
El levantamiento de la cuarentena permitió la reanudación de los deportes individuales. No obstante, entre las medidas sanitarias se recomienda el uso de mascarillas durante su práctica ¿Cuál es la mejor, la más apropiada? No hay consenso sobre cuál de ellas utilizar. Se sugiere que sean semiflexibles y que no rocen constantemente la boca y se humedezcan. Deben ajustarse lo más perfecto a la cara y, de preferencia, sujetos a las orejas y que sean lavables
El deportista debe habituarse lentamente a su uso, porque no todos las toleran por igual. Se recomienda retirarlas parcialmente y a distancia social de otros deportistas cuando se hidraten. Si se retira la mascarilla, se recomienda la distancia social ampliada, aproximadamente 10 metros para los corredores y 20 metros para los ciclistas, para evitar las microgotas exhaladas durante el esfuerzo físico
Con los niños
En los niños lo mejor es no exponerlos al exterior. Se recomienda usar la mascarilla a partir de los 2 años. Se sugiere, además, usar las de tela, reusables, adecuadas en tamaño a su edad y que se ajusten a las características de cada uno de ellos. No hay diferencia en cuanto a las telas ni formas de limpieza con respecto a las de los adultos. Las mascarillas sin filtro N95 y FFP95 se recomiendan para niños con riesgo por comorbilidades (asma, diabetes mellitus, obesidad, etc.)
Ahora bien, ¿cuál es el tiempo de vida útil de una mascarilla? Las quirúrgicas clásicas de color celeste deben ser de un solo uso y luego ser descartadas. No se admite su reúso ni limpieza, debido a que la humedad y la aplicación de jabones, detergentes o desinfectantes, deterioran su capacidad de protección. Sobre las mascarillas sin filtro tipo N95, NK95 o FFP 95 ó 97, la duración dependerá de su uso y manipulación. Se recomienda usarlas durante una semana y luego descartarlas
Lo conveniente es tener más de una mascarilla e irlas alternando en su uso, a fin de conservarlas mejor. Las mascarillas de tela (algodón, polyester, notex) se deben usar por un periodo de una semana y luego lavarlas con agua y jabón. No se debe hacer más de cinco ciclos, luego descartarlas definitivamente. El lavado repetitivo reduce las propiedades de protección, finaliza el especialista
Dr. Sandro Tucto
Dermatólogo de la Clínica Ricardo Palma