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13 de agosto del 2020
Nuestro especialista nos da luces sobre los efectos del frío en pacientes que sufren reumatismo y cómo protegerse
El frío invierno es uno de los peores enemigos de las personas reumáticas, las bajas temperaturas causan estragos en sus cuerpos que ya sufren por las enfermedades que los aquejan. Los dolores en sus articulaciones a veces se intensifican por el cambio brusco de temperatura. “Sí, el invierno puede agravar las enfermedades reumáticas ya establecidas. Pero, ojo, no genera enfermedades reumáticas», explica Óscar Chigne, reumatólogo de la Clínica Ricardo Palma
“Hay una relación directa en el cambio de temperatura súbito cuando es de calor a frío en el caso de problemas reumatológicos como la crioglobulinemia, que resulta de un cambio en la circulación en zonas como manos y pies”, refiere. El invierno perjudica en especial a un grupo de pacientes
«Personas con artrosis, artritis o con tendinitis, pues existen receptores de presión en las articulaciones que son muy sensibles a los cambios de temperatura y de presión, sensibilizan más a las articulaciones. Igualmente, la tortícolis y dolores lumbares son más agudos”, agrega
Alimentos que ayudan al que lo padece
Muchos alimentos vegetales poseen una acción antiinflamatoria que resulta muy útil frente a dolencias como el reuma, actuando también de modo preventivo. Las grasas vegetales, en general, y el omega-3 en concreto desinflaman a nivel sistémico
Las frutas y verduras son muy saludables por su riqueza en antioxidantes: clorofila, resveratrol, vitamina C, quercetina o betacarotenos, entre otros. Hierbas y especias poseen gran poder antiinflamatorio
Entre las especias, la cúrcuma (palillo) multiplica su acción con pimienta negra. Es bueno que se eviten las solanáceas como pimientos, tomates, berenjenas y papas que contienen solanina, que favorece la inflamación articular
Cuidados que debes tener en la temporada de frío
Tal como explica Chigne, las personas con enfermedades reumáticas son más susceptibles al frío, razón por la que deben tener particular cuidado, sobre todo las mujeres, que son las más propensas a padecer estas enfermedades
“Usar guantes y abrigo, especialmente las personas de la tercera edad. Igualmente, las personas que tienen procesos de artrosis en la columna y que el frío les desata una contractura muscular, deben manejarse con calor y abrigo. Muchas veces hacer ejercicio o una actividad física para poder generar una dinámica en las articulaciones que no estén adoloridas, eso ayuda. Algo simple como una caminata de no más de 30 minutos”, concluye nuestro especialista
Dr. Óscar Chigne
Médico reumatólogo de la Clínica Ricardo Palma