Muchos padres se han preguntado qué sentirán sus hijos mayores cuando sepan que un nuevo hermanito viene en camino, si sentirán una mezcla de alegría, celos o angustia de pensar que mamá y papá ya no tendrán mucho tiempo para ellos. Antonella Galli, psicóloga de nuestra clínica, nos brinda valiosas recomendaciones para preparar a nuestros hijos mayores e involucrarlos en este largo proceso de la llegada de un nuevo bebé.
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- Cómo darles la noticia. Pueden contarle un cuento que relate todo el proceso desde que la mamá tiene al bebé dentro de su vientre hasta que nace, los cuidados que debe recibir y cómo una vez que crece, se convierte en un compañero de juegos. Así, el niño conocerá toda la secuencia de eventos que ocurrirán y no le sorprenderá ver a mami tan ocupada cuando nazca el bebé.
- Manejando los celos. Es natural que el niño sienta celos al ver todas las atenciones que recibe el bebé. Para evitar que los celos crezcan, la madre puede aprovechar cuando el bebé duerma o pedir ayuda para pasar tiempo con el hermanito mayor, jugar un rato, salir al parque, etc. De este modo, sentirá que aún tiene la atención de su madre.
- Conociendo al nuevo hermanito. Preparen una fiesta de bienvenida con presentes para el bebé y también para el hermanito mayor, diciéndole que el bebé se lo está obsequiando. Así, el niño se sentirá parte de la celebración, en donde hay atenciones para el bebé y también para él. Tomen fotografías de ambos, así recordará la llegada del bebé como un evento feliz.
- Cómo involucrarlos. Al hermanito mayor se le puede permitir ayudar en algunas actividades de acuerdo a su edad, como: el cambio de la ropita, ordenar los artículos del bebé, contarle un cuento, pasearlo en su coche, hacerle jugar poco a poco mientras el bebé va creciendo.
Recomendación para los primeros días:
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- La mamá también tiene un proceso de adaptación y debe recuperarse física y emocionalmente. Para ello, es esencial el soporte de la pareja y de la familia, apoyando en el cuidado del niño mayor.
- Es muy importante que el niño continúe con sus actividades habituales, para que no sienta que la llegada del bebé ha roto su rutina. Si llevaba algún taller, debe continuar asistiendo y si no se pudiera, pueden realizar cualquier actividad lúdica junto a la familia.
- Presten atención a los cambios de humor, pues su hijo puede mostrarse más irritable, fastidiado o respondón. Es un proceso normal, está asimilando la idea de compartir a sus padres, solo requiere de atención y, sobre todo, de dosis altas de amor y paciencia.
Antonella Galli
Psicóloga de la Clínica Ricardo Palma