La crisis política que vive actualmente nuestro país no solo preocupa a los adultos, los más pequeños de casa también pueden mostrar desconcierto e inquietud debido a la información que suelen obtener de distintas fuentes como la televisión, redes sociales, su círculo cercano de amigos o si notan cierta angustia en sus padres. Pero, ¿es necesario hablar de la situación política con nuestros niños?, ¿cómo abordar el tema? Mary Castro, psicóloga de nuestra clínica, nos brinda valiosas recomendaciones:
- No evadas el tema. Evitar hablar sobre la difícil situación que está atravesando el país solo hará que nuestros hijos busquen información en otras fuentes, las cuales pueden causarles más sentimientos de angustia o dejarlos más confundidos de lo que ya estaban.
- Escúchalos con apertura. Deja que tus hijos te cuenten qué información tienen respecto al tema, que puedan expresar qué es lo que piensan y sienten. Luego de escucharlos, podrás tener mayor claridad acerca de qué es lo que más les inquieta o angustia.
- Explícales con tranquilidad. Como padres y adultos, deben mostrar calma y tratar de absolver las inquietudes que pudieran tener sus hijos en términos sencillos teniendo en cuenta su edad y evitando usar adjetivos.
- Respeta sus sentimientos. Probablemente algunos pequeños puedan tener cierto temor de realizar algunas actividades fuera de casa y prefieran permanecer en ella para sentirse seguros. No los juzgues, ten paciencia, respeta su sentir y muéstrales afecto y comprensión. Recuérdales que, como padres, están para sostenerlos y brindarles soporte de modo incondicional.
- No les hagas asumir una posición. Debido a su corta edad, tus hijos aún no están informados de todo lo que sucede. Por ello, cada vez que lo requieran, debes brindarles información del modo más imparcial que se pueda. Recuerda que tu objetivo debe ser aclarar sus dudas y crear un ambiente en el que tus hijos vayan forjando sus propios juicios o puntos de vista.
- Controla tus emociones y palabras al expresarte. Al tener una posición marcada y definida, podrías ofender o desacreditar a quien tenga una postura diferente a la tuya. Por ello, cuando hables con tus hijos debes controlar tus emociones y palabras, recordando que eres un modelo para ellos y que pueden copiar la forma de expresarte o mostrar intolerancia cuando algunas personas no compartan su postura u opinión.
Mary Castro
Psicóloga de la Clínica Ricardo Palma